Audi, en un giro típico de «esto no es un adiós, sino un hasta luego», ha decidido lanzar una versión conmemorativa del R8 V10, porque al parecer, despedirse con estilo es lo suyo. Si eres de los que vive pegado a las redes sociales de Audi, probablemente ya te enteraste de que el R8 se está despidiendo de la gasolina para flirtear con la electrificación. Pero claro, no sin antes lanzar una edición limitada, porque ¿quién puede resistirse a una última fiesta?
El rumor del pueblo es que este R8 tendrá un ligero aumento de potencia en su ya impresionante motor V10 de 620 CV, añadiendo unos 15 o 20 CV extras, porque, ¿por qué no? En cuanto al exterior, prepárate para ver un poco de fibra de carbono aquí y allá, añadiendo ese toque «soy especial» al coche. Y por dentro, seguramente tendremos una placa conmemorativa y numerada para recordarnos que este no es un R8 cualquiera, sino una edición para coleccionistas.
Hablando de coleccionistas, muchos pensaron que el R8 ya había tenido su último baile con la versión GT RWD, limitada a 333 unidades. Pero Audi, en su estilo, dijo: «Espera, hay más». Esta «última vuelta» promete ser un modelo memorable, una de esas joyas que no se olvidan fácilmente. En resumen, Audi no se despide silenciosamente, sino con una explosión de estilo y exclusividad.